El Museo Casa Botines Gaudí recuperará su aspecto exterior original, tal y como lo proyectó Antonio Gaudí hace más de 130 años. A esta fisionomía, concebida como un palacio de hielo, llegará tras un proceso de restauración que no impedirá la apertura del edificio a los visitantes, ya que afectará cada día, como máximo, a un 2% de su superficie total. La inversión total de FUNDOS en este plan será de 508.362,53 €.
El plan ha sido presentado hoy en las instalaciones del propio Museo por el director general de FUNDOS, José María Viejo; el director de Cultura y Patrimonio de la Fundación y del Museo Casa Botines Gaudí, Raúl Fernández Sobrino; el arquitecto y autor del proyecto de restauración, Félix Compadre; y el director técnico de TRYCSA, la empresa encargada de la restauración, Jaime Represa.
La detallada planificación se llevará a cabo gracias a la coordinación de todos los departamentos del Museo y servirá además para realizar un estudio y documentación minuciosa del edificio por parte de su equipo de investigadores. Tres décadas después de la última intervención en la fachada, estas labores de restauración servirán para proteger la colección y los elementos internos del edificio de los efectos adversos que pueden conllevar el deterioro de la piedra y de las carpinterías exteriores.
El Museo Casa Botines Gaudí se trata del único edificio de la ciudad que cuenta con la máxima distinción patrimonial, el premio Hispania Nostra. Cabe recordar que, en sólo 1000 días, pasó de ser un edificio de futuro y uso incierto a convertirse en el principal museo privado de Castilla y León. FUNDOS afronta esta actuación como el primer hito hacia la conmemoración del centenario de la muerte de Gaudí en 2026 y el objetivo de conseguir para el edificio la declaración de Patrimonio de la Humanidad.